Dioses romanos

Júpiter: el Júpiter de la antigua roma es el equivalente a lo que fue Zeus en Grecia. A Júpiter se lo suele representar con sus tres atributos: el águila, el cetro y el rayo. Es importante el elemento del rayo pues si nos fijamos en la etimología de su nombre nos damos cuenta de donde viene. Iuppiter, la traducción latina de Júpiter, proviene de las raíces dyu -luz- y piter, es decir, padre. Con lo cual, el nombre de Júpiter significa El padre de la luz.

Juno: adaptación romana de la Diosa griega Hera. Esta incesante lucha por el amor de su marido hizo de Juno en una diosa muy querida por la población, que la convirtió en la protectora de las mujeres casadas, la patrona del hogar, de los partos y del honor.

Minerva: adaptación romana de la Atenea griega.Minerva era hija de Júpiter y Metis, quién fue diosa de la prudencia y primera esposa de Metis. Por miedo a engendrar a alguien más poderoso que él que pudiera destronarlo, Júpiter devoró a Metis, pero justo al hacerlo comenzó a sentir un gran dolor de cabeza. Le pidió a Vulcano que le abriera la cabeza con un hacha para acabar con ese enorme dolor.

Apolo: si por algo era venerado y querido Apolo era por ser el dios de la música, la poesía, la elocuencia y las artes en general. Sus atributos principales eran el arco y la lira, con la cual era capaz de inspirar a músicos y poetas.

Diana: adaptación romana de la diosa griega artemisa. Es la hermana gemela de Apolo, hija de Júpiter y Latona. Ella vive en los bosques, y se dedica a cazar con arco y flechas acompañado por ninfas. También se le solía rezar como diosa de la noche y los infiernos, es por ello que se le acostumbra a identificar con la luna. Diana permaneció por siempre virgen y joven. y se empezó a venerar como diosa de la castidad.

Neptuno: es el equivalente romano del griego Poseidón. Es el hermano mayor de Júpiter. Entre ellos dos y Plutón, el tercer hermano, destronaron a su padre del poder, repartiéndose después el universo. Neptuno se quedó con el mar, le convirtió en dios de los mares, las tempestades y los vientos. Se le suele representar como un dios iracundo y malhumorado, incluso violento. De sus ataques de rabia nacen las tempestades, las olas y los terremotos.

Marte: podría pasar por una adaptación romana de Ares, aunque hay diferencias entre estas dos deidades. Marte es hijo de Júpiter y Juno, y aunque ha llegado como el dios de la guerra, lo cierto es que también lo era de la cosecha y las vegetaciones. Mientras por un lado era un dios guerrero, por el otro era el que protegía al pueblo ante las amenazas y se encargaba de que los campos dieran frutos. Marte fue el padre de Rómulo y Remo.

Venus: es otra hija de Júpiter, una deidad que en la tradición griega es conocida como Afrodita. Es otro de los dioses más importantes de la antigua roma, ya que es considerada la diosa del amor, la belleza y la fertilidad.Venus tiene mucha importancia en el mundo por los hijos que tubo. Por un lado Cupido, el dios encargado de lanzar las flechas del amor, y por el otro Eneas, el padre de los romanos.

Mercurio: es el equivalente en la roma antigua de lo que fue Hermes en la mitología griega. Es otro de los hijos de Júpiter, y se encargaba de hacer de mensajero entre el resto de dioses. Esto lo convirtió en el dios del transporte y los viajeros e hizo que entre sus atributos se cuente siempre un par de alas en sus talones.

El nombre Mercurio está emparentado con la palabra mercado, razón por la cual se considera el dios de los intercambios comerciales, los negocios y el comercio.

Vesta: puede corresponderse con la Hestía griega, aunque en el caso romano su importancia fue mucho mayor que la que tuvo en Grecia. Era hermana de Júpiter y era la diosa del hogar, a quien se le encargaba su protección, así como de la fidelidad. El símbolo sagrado de Vesta es el fuego, los romanos consideraban que al prender una vela ya invocaban su presencia. 

Fortuna: es una diosa totalmente romana, que no tiene ningún vínculo con alguna deidad griega. Considerada hija de Júpiter y Juno, es una de las más antiguas divinidades. Fortuna representa el azar puro, era la culpable de todos los hechos prósperos y buenos que sucedían a las personas así como a los hechos desgraciados. 

DIOSES ROMANOS.